José Luis Remualdi

Bajo La Parra

 

De ti, joven hermano que avizoras meditabundo, tu ocaso
aún lejano, bajo la esmeralda marejada de tu parra, pienso:
¡Qué estéril tu vino y qué fértil tu injusto desvelo! Yo,
que entrado ya en crepuscular ciclo, y en tal actitud te veo,
inspirado en Omar Kheyyam, el persa, te digo:

¡Canta y baila bajo tu parra, mientras puedas, hermano!
Organiza fiestas con mucho vino y guitarras y muchachas.
A ellas, antes que te falten, róbales disfrutadas, a pura mente,
sus rosas rojas de la sombra entre sus vértices, para así,
inspirado en su evocación, humectar sentimental,
las gasas de tus futuras noches vacías.

Confía en mí, que prudente hoy ante tales lozanías,
y sin la propia, aun desde mi noche desdeñosa
de pétalos vivos, solo, recupero la piel de tantas flores
que más de uno jamás tuvo, y, que fertilizan mi sonrisa
en cada surco de mi rostro, por haberme ocupado 
en su momento de acopiar, para mi sementera la semilla.

No empobrezcas tu riquísimo presente juvenil,
sé muy bien de qué te hablo: sufre en vano y le vendrán
anticipadamente a tus venas, sus tiempos de sequía y soplará
tu soledad hasta desprender tu corazón, que seco, rodará
como un vencido más, entre los corazones secos de la parra.

¡Canta y baila bajo tu parra, mientras puedas, hermano!:
Con todo tu vigor, explota al máximo la aurífera veta del amor,
antes que tu música final, en cada noche insomne tuya,
sea tan sólo la del inexorable tren de tu nostalgia y su estela
de recuerdos adoloridos, plañideros como perros.

Noches de triste fundamento, y tú, con tu madurez exorbitada,
fija en el pasado vacío, sin la más leve señal de estío
presente ni futuro. Entonces sí, sin siquiera el recurso
de una quimera mendicante, seguro lamentarás tu caviloso
desperdicio de estos días.

¡Canta y baila bajo tu parra, mientras puedas, hermano!
Travieso remolino de emociones que un día asentará la muerte,
y, disuelto por las lágrimas de quienes te han amado, te harás barro
para hechura de otro. ¡Perfúmate en la vid, riégate de vida, hermano!
¡Canta y baila bajo tu parra mientras puedas!

¡Salud! 

 

Todos los derechos pertenecen a su autor. Ha sido publicado en e-Stories.org a solicitud de José Luis Remualdi.
Publicado en e-Stories.org el 23.12.2013.

 
 

Comentarios de nuestros lectores (0)


Tu comentario

¡A nuestros autores y a e-Stories.org les gustaría saber tu opinión! ¡Pero por favor, te pedimos que comentes el relato corto o poema sin insultar personalmente a nuestros autores!

Por favor elige

Post anterior Post siguiente

Más de esta categoría "Filosófico" (Poemas en español)

Otras obras de José Luis Remualdi

¿Le ha gustado este artículo? Entonces eche un vistazo a los siguientes:

Aquel Llanto - José Luis Remualdi (Penas de Amor)
A special moment - Helga Edelsfeld (Filosófico)
Emergenza primaverile - Antonio Justel Rodriguez (General)