¡... ay, quién pudiera construir una gota de luz ardiendo que instruyera y sanara el corazón !
porque ya pasaron los diez mil carros de guerra,
y legiones cantando,
y estandartes,
tambores,
pífanos,
vivas...;
... y, sin embargo, uno podría tocarse frente y hombros y sentirse llorar,
oír retazos de cielo caer,
ser cubil de vértigos,
abstraerse,
diluirse,
huir,
desaparecer en medio de un reguero de toses y piedras marchando, rompiéndose y cayendo;
...y es que ni siquiera, ni siquiera mi propia compasión me asiste y justifica.
http://www.oriondepanthoseas.com
Todos los derechos pertenecen a su autor. Ha sido publicado en e-Stories.org a solicitud de Antonio Justel Rodriguez.
Publicado en e-Stories.org el 25.10.2016.
Más de esta categoría "Psicológico" (Poemas en español)
Otras obras de Antonio Justel Rodriguez
¿Le ha gustado este artículo? Entonces eche un vistazo a los siguientes: