Maria Teresa Aláez García

El fin del mundo.

El fin del mundo.

No hacen mas que darnos noticias pésimas acerca de que el fin del mundo esta cerca.

Siempre se intenta forjar la inseguridad en la gente con esta noticia.

Y la solución viene de manos o de un gurú o de un partido o de un líder que pensara por los seis mil millones de pobladores humanos mas los no se cuantos seres vivos que habitamos el planeta y habrá que nombrarlo Emperador Universal y darle las gracias.

Cuantas personas han fallecido por dejarse llevar de este tipo de grupos o de personas que manipulan a los demás para ganar dinero, dejando en el interior ajeno un montón de culpas y desgracias y permitiendo que solo ellos puedan curarlo para mantener a sus seguidores al lado. Cuanta gente de buena fe ha caído con este tipo de personas, siguiéndoles, alentándoles, protegiéndoles.

Según dicen, en la Biblia se habla del fin de los tiempos. Que si hay cataclismos, mas que antes – siempre ha habido multitud de cataclismos, lo que ocurre es que antes las noticias iban mas lentas o no se enteraba nadie de lo que pasaba en el mundo porque no era conocido en toda su extensión – que si la gente es depravada – antes tuvimos Grecia, Roma, Sodoma, Gomorra y a los Borgia y diversos dictadores y jefes de gobierno, presidentes, etc..  y estos últimos con todo conocimiento de causa, que parece que cuando el ser humano llega al poder o se enriquece olvida de donde proviene y lo que ha aprendido – que si los ángeles tocan las trompetas y se producen distintas catástrofes – según el río Tinto en Huelva, que es de color, así, de vino tinto, y cuando le cae mas hierro parece de color sangre, estamos sumidos en una catástrofe continua – y ahora solo nos faltan dos catástrofes mas: el meteorito y un planeta que va a chocar contra nosotros.

Ya imagino al cinturón de asteroides abriéndose galantemente para dar paso al meteorito y que nos mate bien y a la luna apartando el trasero para que el planeta nos de de lleno en el occipital. Pero al margen de todo esto, están trabajando los científicos para ver como impiden que el meteorito nos llegue del todo encima. Y sobre todo para prevenir otro meteorito como este que puede andar pululando por el espacio. Que muchos meteoritos ya han caído en nuestro planeta, los que se le escaparon a la luna y que no cayeron sobre los otros planetas.

Nosotros seguimos igual: matándonos, manipulándonos, pensando en mezquindades en lugar de salvar a la humanidad, mejorarla y salvar el planeta o huir hacia otro en unas condiciones mas o menos similares. Siendo católica,  siento decir que si estoy en contra del gran atraso que se sufrió por causa de la religión en cuanto al desarrollo tecnológico porque ahora quizás estaríamos evitando todo esto. También en otros desarrollos pero no en todos. Y la religión católica no se practica en todos los países. El cristianismo tampoco .Cada cosa debería ser tenida en cuenta en su medida. Aun así, sigo creyendo en Dios y sigo creyendo que por El aun no hemos acabado con nosotros mismos. Aunque por probar no quede y veremos donde nos llevan las siguientes pruebas del Colisionador de hadrones.

A ver, el Universo. Para que molestarse en montar espectáculos de cataclismos. Si nosotros mismos ya nos tenemos para aniquilarnos mutuamente.  Ayudadnos a mejorar y a no hacerlo.

Y sobre todo, ayudar a la gente no metiéndole miedo para usarla mas y peor. Tenemos que crecer. Cada cual que piense como quiera mientras no haga daño a sus semejantes. Quien quiera que conserve sus tradiciones mientras no sean lesivas y su cultura, su idioma y sus enseñas mientras no asesine por ellas. Pero es imprescindible aprender a respetarnos y a ayudarnos mutuamente. La gente no va vestida del mismo color por la calle. Cada cual elige el modelo de ropa y color que le gusta al igual que los zapatos o lo que mejor le va. Igual ocurre con todo aunque es una comparación bastante frívola. Pero cada religión va a  un tipo de persona y cada idea política también porque cada persona necesita una sociedad y unas ideas que la protejan y la cuiden, dándole felicidad dentro de las capacidades de ella y dentro de sus esquemas mentales y su visión del mundo. Pero todos, mientras no estemos enfermos, miraremos igual de mal un asesinato cometido con impunidad o frialdad – o no que hay quien lo defiende – y todos estaremos luchando por evitar la enfermedad.

De igual modo hemos de luchar por evitar la contaminación de información que se nos introduce en el cerebro y si nos dan noticias desagradables como que el mundo se termina por causas ajenas a nuestra voluntad, dadnos al menos la contrapartida: se hará algo para destruir el meteorito, se pide ayuda para ver que se puede hacer ante la catástrofe o incluso desmantelar elementos bélicos y reconvertirlos en naves, cohetes, en maquinas para salir al espacio y no para asesinarse. Seguro que habrá buenas personas con la suficiente imaginación como para convertir la espada en un arado y el rifle de repetición en un dispositivo para taladrar chapa fácilmente y poder insertar tornillos o clavos para ensartar, refundiendo después el rifle y haciendo con el alguna pieza de motor para otro aparato.

En cuanto a los liderillos de anda por casa que sacan el dinero a espuertas a sus seguidores o a quienes se llevan un grupo para suicidarse y llegar al cielo donde le espera algún personaje que les habla en su imaginación, se ruega que si ellos quieren suicidarse pidan instancia y lo hagan. Pero que dejen en paz a sus seguidores para que elijan otra luz y que cambien el fusible averiado del chip cósmico que les pusieron con su adoctrinamiento. Muchas familias lo agradecerán.  Máxime si dejan en paz a sus hijos  e hijas sobre todo en cuanto a su iniciación sexual con fines particulares  y egoístas.

 

Todos los derechos pertenecen a su autor. Ha sido publicado en e-Stories.org a solicitud de Maria Teresa Aláez García.
Publicado en e-Stories.org el 06.05.2009.

 
 

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