CATARATAS DE BOLETUS

 
 
 
                        De repente, empezaron a bombardear hercúleamente el bosque. Inmensos cristales salpicaban deformándolo todo. Nos vimos obligados a refugiarnos bajo una enorme seta, ubicada junto a la prominente haya. Miriam respiraba atropellada, tosía mientras sacudía sus alas. Mirándola, improvisé un piscolabis de un delicioso néctar que guardaba entre mis patas por real encargo de la colmena. Viendo esas antenas arqueándose mientras sonreía, compensaría después el castigo que ordenara nuestra caprichosa reina. Porque ese momento mágico desde el himenio cielo improvisado, sería irrepetiblemente único. 
 

("Seleccionado en el libro 10 del 10 del 11, correspondiente al Segundo Certamen de Mico Micro Relatos San Jorge - Asociación Micológica Leonesa entregado bajo seudónimo: Semilla del diablo.) 

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